Ciudad de México, 01 de septiembre.-

El robo de combustibles se ha convertido en un problema de seguridad nacional, con gran impacto en las finanzas públicas, advierte Petróleos Mexicanos (Pemex) en un documento enviado a la Comisión Permanente,

Detalla que dio inicio a procesos administrativos contra 48 de sus trabajadores involucrados en el saqueo de ductos, además de rescindir el contrato a 11 gasolineras y revisar los casos de 13 más, que comercializaron los hidrocarburos sustraídos ilegalmente.