EL TEMIDO FALSO ESCORPIÓN MEXICANO

Por: Alberto González-Romero

Red de Biología y Conservación de Vertebrados, Instituto de Ecología A.C. 

 

Foto 1. Hembra de falso escorpión (Barisia imbricata), nótese el patrón de coloración barrado y la cabeza poco diferenciada del cuerpo. El ejemplar de la fotografía muestra su cola completa. Crédito: Alberto González Romero

Resumen

Se presenta información sobre los mitos en torno a un grupo de lagartijas endémicas de México dando énfasis a la lagartija conocida comúnmente como “escorpión” en el Eje Neovolcánico Transversal y se resalta el papel de estos animales en la naturaleza y la necesidad de conservarlos.

 

Palabras Clave

Reptiles, Lagartijas

 

Abstract

Information is presented on the myths surrounding a group of lizards endemic to Mexico, with emphasis on the lizard commonly known as the “scorpion” in the Eje Neovolcánico Transversal, highlighting the role of these animals in nature and the need to conserve them.

 

Key words

Reptiles, Lizards

 

México es reconocido en el mundo por ser el segundo lugar en cuanto a la diversidad de reptiles con un total de 864 especies, también es conocido por el folklor, mitos y leyendas en torno a los reptiles, ya que para los mexicanos la mayoría de las lagartijas y serpientes son malas y una de las especies más vilipendiadas y malamente temidas son los falsos escorpiones que perteneces a la familia Anguidae que agrupa unas 49 especies de los géneros Abronia, Anguis, Barisia, Celestus, Elgaria y Mesaspis, que con excepción de las lagartijas sin patas del género Anguis (serpientes de cristal), el resto son conocidos comúnmente como escorpiones y todas son concebidas como animales venenosos a pesar de ser completamente inofensivos. La gran mayoría (43) de estas especies son endémicas de México (sólo se encuentran en nuestro país). Estas lagartijas comparten entre si la forma alargada de su cuerpo, la cola generalmente más larga que la cabeza y el cuerpo, su cabeza tiene forma triangular más marcada en los machos y una lengua protráctil de color negruzco o morada que sacan y meten de manera inquisitiva que le sirve para relacionarse con su ambiente y encontrar sus presas de la misma forma que las serpientes y cuando se irritan, mueven su cuerpo en forma serpenteante y abren la boca y emiten un siseo que le agrega a la vista de un animal parecido a las serpientes un carácter más agresivo y peligroso, lo que ha traído como consecuencia que sean estigmatizados por las personas, principalmente por la gente de campo, y matados por falsas creencias.

Foto 2. Macho de escorpión (Barisia imbricata), se aprecia la coloración uniforme verde olivo y la cabeza triangular y grande. También se puede ver claramente el pliegue lateral que los distingue de otras lagartijas de la familia. Se puede apreciar la cola regenerada terminada en una punta aspecto que hace pensar a algunas personas que pican con ella. Crédito: Alberto González Romero

 

Estas 48 especies han sido divididas por los estudiosos en dos grupos los que presentan un pliegue lateral de escamas granulares y los que no lo tienen, al grupo de los que presentan esta característica se les conoce en forma general como gerrhonoti, el pliegue lateral les permite respirar y expandir el cuerpo para tragar presas grandes porque su cuerpo está cubierto por escamas de forma cuadrada y debajo de cada escama dérmica tienen una escama ósea (osteodermos a la manera de los cocodrilos) que hace que su cuerpo sea más rígido que el resto de las lagartijas, que le provee también de una protección en contra de sus enemigos naturales, y que ha hecho que en inglés se les conozca comúnmente como Plated lizards o aligator lizards que significa.lagartijas de placas o lagartijas cocodrilo.

Dentro de este grupo encontramos al falso escorpión del centro de México distribuido en el Eje Neovolcánico Transversal y zonas adyacente: Barisia imbricata (Wiegmann), conocida por los antiguos mexicanos como “acaltetepon, acaltetepun o acaltetepuntli” del náhuatl. Son lagartijas de cuerpo alargado con patas muy cortas, colas muy largas y una cabeza triangular, presenta una coloración uniforme marrón o verde olivo en los machos y un patrón barrado en las hembras. Las lagartijas del género Barisia, son los gerrohnotinos de más amplia distribución en México, se le encuentra en las tierras altas dominadas por bosques templados de pinos, pino-oyamel, pino-encino. Generalmente se les encuentra en claros y en áreas de bosque abiertas, así como en los bordes de cultivos delimitados por magueyes y zacates. Son de actividad diurna y se mueven lentamente, cuando es sorprendida huye plegando sus miembros al cuerpo y con movimientos serpenteantes se escabulle en la maleza, si no tiene escapatoria hace frente a su atacante con movimientos serpenteantes y abriendo la boca y emitiendo un siseo que lo confunde y que es la razón por la cual la gente cree que son venenosas y los matan.

Foto 3. Cría neonata de escorpión (Barisia imbricata), las crías de esta especie nacen vivas y son una replica exacta de sus padres, una hembra llega a tener entre 6 y 10 crías por parto, por lo general a finales del verano o el otoño. Crédito: Alberto González Romero

En el campo mexicano está muy difundida la idea de que la mordedura de estas lagartijas es mortal, algunos creen que pica con la lengua o con la punta de la cola ya que muchas lagartijas presentan sus colas regeneradas que terminan en una punta aguda Otras tantas le atribuyen la posibilidad de emitir un vaho mortífero o más aún existe la creencia de que estas lagartijas emanan una radiación que puede perjudicar a una persona que duerma o se siente en el suelo sobre una de estos animales escondidos bajo tierra. La verdad es que estas lagartijas lejos de ser venenosas, o consideradas malas son muy benéficas para el campo y para sus pobladores, ya que dentro de sus presas están una gran variedad de arañas incluyendo a las peligrosas viudas negras y reclusas, y también consumen a los verdaderos escorpiones (alacranes) y muchas especies de insectos que son plagas para los cultivos. En antiguos trabajos las consideraban una especie muy abundante, en la actualidad por la destrucción de su hábitat y la sistemática matanza por falsas creencias son la causa de que cada día sean menos abundantes. En la actualidad es una especie protegida por las leyes mexicanas clasificada en la NOM-059-SEMARNAT-2010 como bajo protección especial (Pr).

Si te llegas a topar con una de estas lagartijas, obsérvalas ya que son muy interesantes y déjalas en paz hacer su trabajo de depredadoras de arañas y alacranes, que sí pueden dañarte y de insectos de los cuales muchos están dañando tus cultivos. No las mates recuerda que en México de las 417 especies de lagartijas solamente dos pueden llegar a ser peligrosas, aunque raramente pueden causar la muerte. Éstas son: el monstruo de gila o verdadero escorpión del desierto sonorense y los lagartos enchaquirados de las selvas secas de la Costa del Pacífico y zona central de Chiapas.

Figura 4. Monstruo de gila o escorpión (Heloderma supectum) del desierto sonorense es una de las dos únicas especies de lagartijas venenosas en el mundo, muy similar al lagarto enchaquirado o escorpión (Heloderma horridum) de las selvas secas del pacífico mexicano. Crédito: Alberto González Romero

 

Pies de figuras:

Todas las fotografías fueron tomadas por el Dr. Alberto González Romero

Foto 1. Hembra de falso escorpión (Barisia imbricata), nótese el patrón de coloración barrado y la cabeza poco diferenciada del cuerpo. El ejemplar de la fotografía muestra su cola completa.

Foto 2. Macho de escorpión (Barisia imbricata), se aprecia la coloración uniforme verde olivo y la cabeza triangular y grande. También se puede ver claramente el pliegue lateral que los distingue de otras lagartijas de la familia. Se puede apreciar la cola regenerada terminada en una punta aspecto que hace pensar a algunas personas que pican con ella.

Foto 3. Cría neonata de escorpión (Barisia imbricata), las crías de esta especie nacen vivas y son una replica exacta de sus padres, una hembra llega a tener entre 6 y 10 crías por parto, por lo general a finales del verano o el otoño.

Figura 4. Monstruo de gila o escorpión (Heloderma supectum) del desierto sonorense es una de las dos únicas especies de lagartijas venenosas en el mundo, muy similar al lagarto enchaquirado o escorpión (Heloderma horridum) de las selvas secas del pacífico mexicano.

 

Créditos de las figuras:

Todas las fotografías fueron tomadas por el Dr. Alberto González Romero