Estados Unidos. 28 de abril del 2022.-Un nuevo capítulo se abrió en el escandaloso y mediático juicio por difamación entre el actor Johnny Depp y su expareja, la actriz Amber Heard, recientemente diagnosticada por una psicóloga forense y testigo en su contra como una persona con “trastorno límite de la personalidad (borderline) y trastorno histriónico”.

De acuerdo con el testimonio de Shannon Curry, quien examinó durante dos días la salud mental de Heard en diciembre del año pasado, la actriz “obtuvo resultados congruentes con estos diagnósticos”.

La psicóloga cree que Heard “exageró enormemente” (respecto a la supuesta violencia doméstica de Depp) y declaró que algunas de las características principales del trastorno de personalidad de la actriz incluyen “mucha ira interna y hostilidad”, una tendencia a ser “moralista”, con “estados de ánimo fluctuantes”. “(Estas personas) pueden reaccionar violenta y físicamente (…) Con frecuencia serán abusivos con sus parejas”, acusó.

Trastorno histriónico: ¿qué es y qué efecto causa?
Pero ¿qué es el trastorno histriónico de la personalidad? El psicólogo y psicoanalista Daniel Fernández (M.N.: 41.671) explicó que el histrionismo se ve claramente en los típicos casos de histeria estudiados por Sigmund Freud, el padre del Psicoanálisis.

“Cuando se habla de síndrome, se habla siempre de un conjunto de signos y síntomas. Signos es lo que se muestra y se ve desde afuera, y los síntomas es lo que siente la persona. Al síndrome histriónico se lo conoce también como trastorno histriónico de la personalidad. Las principales características son que la persona se muestra provocativa sexualmente y seductora, muy teatral, dramática, sumisa, busca llamar la atención, tiene cambios bruscos del estado de ánimo, etcétera, todas características de la histeria”, precisó.

En ese sentido, Fernández señaló que el cuadro clínico sería la histeria. “Las estructuras psíquicas normales son las neurosis, que pueden ser obsesivas, fóbicas o histéricas. Dejan de ser normales dependiendo del grado. Quiero aclarar que no es lo mismo hablar de histeria que del síndrome histriónico, sino que éste último es simplemente un indicador de la histeria”, detalló.

Enrique De Rosa Alabaster (M.N. 63.406), especialista en Psiquiatría y Psicología Médica, en Neurología y en Medicina Legal y Forense, coincidió con lo anterior al decir: “La personalidad teatral histriónica es solo un aspecto de la disociación de las estructuras hoy llamadas narcisistas y, antes, histéricas”.

Por su parte, la psicóloga María Victoria Sánchez López sostuvo que las características del trastorno histriónico son: patrón general de excesiva emotividad y búsqueda de atención que se da en diversos contextos, comenzando al inicio de la edad adulta.

Síndrome histriónico, el trastorno que le diagnosticaron a Amber Heard
“El mismo presenta más de la mitad de los siguientes síntomas: incomodidad cuando no se es el centro de atención, habituales comportamientos seductores en la interacción social, utilización del aspecto físico para llamar la atención, considerar las relaciones más íntimas de lo que son, expresión emocional superficial y cambiante, forma de hablar excesivamente subjetiva y con pocos matices, teatralidad y ser fácilmente influenciable”, precisó.

 

No obstante, la especialista aclaró: “Dentro de estas características, puede haber variabilidad en cada persona, igual que en otros trastornos. Una persona es más que el trastorno que pueda tener”.

Según Irina de la Flor, directora del Master de Coaching Consciente de la Escuela de Salud Integrativa, la personalidad histriónica se caracteriza por una serie de rasgos que externamente son fácilmente reconocibles. Para ella, las personas histriónicas suelen:

Hablar más alto de lo normal.
Llamar la atención exagerando o creando historias que sean especiales para conseguir ser el centro de atención.
Reaccionar de forma excesiva a acontecimientos o situaciones.
Cambiar mucho de estados emocionales: unas veces pueden mostrarse muy felices y en poco tiempo, pueden mostrarse realmente tristes o alicaídas.
Usar el drama o casi la teatralización en sus reacciones para no pasar desapercibidas.
Utilizar su físico también para llamar la atención, moviéndose de forma exagerada, haciendo grandes gestos con las manos o con el cuerpo.
“Este tipo de personalidad, si no se corrige a tiempo, puede llegar a convertirse en un trastorno. En nuestra vida, seguramente hayamos conocido a una o más personas con esta forma de ser”, afirmó la experta, quien añadió que, así como los síntomas externos son fácilmente reconocibles, para comprender el origen de esta personalidad y del dolor que la genera, hay que hacer un análisis en profundidad.