Xalapa, Ver., 17 de agosto.- La alerta de Violencia de Género (AVG), padece un secuestro institucional que la vuelve un mecanismo lento y complejo para frenar la impunidad y aumento de feminicidios, señaló el investigador y profesor de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, Nelson Arteaga Botello.

El académico que es parte del grupo de trabajo de la AVG en Morelos y Estado de México, señaló que la alerta no necesariamente representa una solución para disminuir los asesinatos, pero sirve como instrumento para reconocer que hay una grave problemática y poner el tema en la opinión pública.

Entrevistado en el marco del seminario “Violencia, corrupción institucional e impunidad en México”, consideró que la alerta se enfrenta a retos de cómo medir su efectividad, cuánto tiempo funciona, y cómo puede ser evaluada.

“La Alerta de violencia funciona bien hasta que el grupo académico emite las recomendaciones, hasta que llega al gobierno estatal, ahí entra en un bache, ahí se quiebra