Xalapa, Ver., 10 de septiembre.-
El arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, consideró que una persona solo enderezará su camino si se le habla a tiempo y se le hace ver sus errores, siempre con cariño y objetividad.
Y es que dijo que actualmente son tantos los derechos de los niños, que ni los padres ni los profesores les pueden llamar la atención al portarse mal, lo que los hace en ocasiones cómplices o “alcahuetes”.
“Son tantos los derechos de los niños que ya ni los papás les pueden llamar la atención, ni los profesores, es importante hacerles saber que se han portado mal, sino como se va a enderezar, una persona que se le habla a tiempo endereza el camino, el rumbo, pero si no se le dice nada sigue pensado que hace bien o que lo defienden, no hay que ser cómplices o alcahuetes, sino manifestarnos de lo que pasa”.
En la homilía de este domingo, refirió también que es deber de las autoridades, ya sean los padres, directores, gerentes y sacerdotes, señalar y llamar la atención, sino las cosas empeoran.
Explicó que el Evangelio de este domingo expresa que cuando se vive en familia o en comunidad cristiana, si algún hermano o hermana comete un pecado, es necesario llamarle la atención de manera afectuosa, pero no hacer un chisme de ello y si este no entendiera no quisiera enmendar el error, deberá de acudirse a los testigos o a la misma comunidad.
“No empiecen a hablar con otros, porque a veces terminan peleados. Tanto en cosas jurídicas y judiciales, se necesita el testimonio de una o dos personas, es muy importante tomarlo en cuenta en nuestra familia y en nuestra comunidad. Si a ellos no les hace caso, entonces decirlo a la comunidad, a la autoridad para que se ponga remedio”.
Fotos: Eka Ríos