• El quehacer tutorial se impulsa hacia el ambiente en línea, lo que permite flexibilizar la operación del MEI y aumentar las posibilidades de formación integral de los estudiantes 
Elizabeth Ocampo, investigadora del IIE, habló sobre el desarrollo de una guía de buenas prácticas en tutorías académicas

Elizabeth Ocampo, investigadora del IIE, habló sobre el desarrollo de una guía de buenas prácticas en tutorías académicas

 

Xalapa, Ver.- Elizabeth Ocampo Gómez, investigadora adscrita al Instituto de Investigaciones en Educación (IIE) de la Universidad Veracruzana (UV), dijo que se trabaja en el desarrollo de una guía de buenas prácticas en las tutorías académicas que se ofrecerán en el próximo semestre. 

El trabajo se dio derivado de un diagnóstico de necesidades realizado con las 184 coordinaciones de sistemas tutoriales que operan actualmente en el nivel Licenciatura en las diferentes regiones. Como parte del trabajo con dichas coordinaciones, surgió la necesidad de establecer directrices metodológicas que apoyen el trabajo que realizan los tutores académicos. 

Lo anterior, ayudó al desarrollo de una guía de buenas prácticas en las tutorías académicas que se ofrecerá el próximo periodo escolar y es coordinada desde la Dirección General de Desarrollo Académico e Innovación Educativa (DGDAIE) con la colaboración de Elizabeth Ocampo. 

Con respecto al seguimiento de los resultados obtenidos por la Comisión de Evaluación del Modelo de Educación Integral y Flexible (MEIF), señaló que es realizado por la Secretaría Académica y la DGDAIE de esta casa de estudios. 

Con relación al desarrollo de la guía de buenas prácticas en las tutorías académicas, detalló que este trabajo se hace desde el semestre pasado y lo llevan a cabo con grupos focales de tutores, coordinadores de tutorías y estudiantes del semestre. 

El objetivo es conocer las condiciones y dinámicas del trabajo de los tutores mejor evaluados, a fin de identificar las estrategias que aplican para lograr los objetivos, así como para responder a las expectativas de la función tutorial en la UV. 

Se busca identificar los factores que entran en juego para que se realicen tutorías sobresalientes; entender de qué manera tanto las condiciones organizativas como las estructurales inciden en los resultados de las tutorías bien valoradas. 

“Con apoyo de la DGDAIE fueron a todas las regiones; sin embargo, este trabajo se vio interrumpido por la pandemia, pero continuamos con los grupos focales de manera virtual.” 

Con los grupos focales, detalló, trabajan temas generales como: ¿qué hacen para lograr tutorías sobresalientes de acuerdo con lo que se valora en la evaluación que realizan los estudiantes al término del periodo escolar?; ¿qué y cómo incide la relación con sus tutorados en el éxito de las practicas tutoriales?¿qué rol juegan los factores organizacionales: la Universidad, su Facultad, su Coordinador, la infraestructura, en su desempeño tutorial?, y ¿cómo afronta los retos que cada uno de éstos presenta? 

Por último, Elizabeth Ocampo dijo que decidieron trabajar con tutores mejor evaluados, para darle un giro a la evaluación y enfocarnos en las buenas prácticas y aprender de ellas. También lo hacemos porque cada vez hay más interés en documentar qué sucede con las prácticas exitosas, qué entra en juego. 

En otras acciones relacionadas con el MEI, especialmente con su operación, está en revisión el reglamento de planes y programas de estudios, por lo que se espera que refleje una visión del currículo universitario acorde al contexto actual, tanto en las innovaciones que la Universidad ha incorporado como para el desarrollo de inclusiones al modelo curricular, como la experiencia recepcional y el servicio social. 

En entrevista aparte, Liliana Betancourt Trevedhan, titular de la DGDAIEdijo que es importante destacar que además del fortalecimiento al quehacer tutorial, que así mismo se ha diversificado en diferentes tipos, actualmente la tutoría se impulsa hacia el ambiente en línea, lo que permite flexibilizar por un lado la estrategia para la operación del MEI para aumentar las posibilidades de formación integral de los estudiantes, pero también para atender a una necesidad social y de salud que vivimos todos en este momento derivado de la pandemia. De tal forma que esta experiencia de vida no sólo nos invita a reflexionar sobre lo inmediato, sino que nos obliga a repensar el futuro para continuar en una nueva normalidad académica. 

En otras acciones relacionadas con el MEI, y sobre todo de su operación, Liliana Betancourt refirió: “El reglamento de planes y programas de estudios se encuentra en una profunda revisión, de tal forma que en él se espera reflejar una visión del currículum universitario, acorde al contexto actual, tanto en las innovaciones que la Universidad ha incorporado (la noción misma de experiencia educativa, por ejemplo), pero también para el desarrollo de inclusiones al modelo curricular como la experiencia recepcional y el servicio social.