En los rincones más internos de la naturaleza coexiste una armonía matemática que transcurre silenciosa, como una sinfonía que solo los observadores más audaces pueden percibir; es en el centro de esta sinfonía donde el número áureo y la serie de Fibonacci se entrelazan, creando una composición matemática que se proyecta en la estructura misma de la vida. Esta conexión entre el número áureo y la serie de Fibonacci revela una fascinante representación matemática que se manifiesta de maneras asombrosas en el reino biológico.
Read More