- Son hábitat de aves migratorias y zona de protección de peces y moluscos
- Además capturan gases causantes del efecto invernadero
Carlos Hugo Hermida Rosales
03/03/2020. Xalapa, Ver.– Gilberto Silva López, del Instituto de Investigaciones Biológicas (IIB) de la Universidad Veracruzana (UV), impartió la conferencia “Manglares: un valioso recurso natural en un mundo cambiante”, el 21 de febrero en el Centro Recreativo Xalapeño, en el marco del evento La Biodiversidad Amenazada, que realizó el IIB con apoyo de la Facultad de Biología y el Ayuntamiento de Xalapa.
El investigador habló sobre los servicios ambientales que brindan los manglares y explicó la importancia de conservarlos; asimismo, compartió que en el mundo se tienen documentadas 55 especies de mangle, cuatro de ellas se encuentran en México: Conocarpus erectus, llamado botoncillo, además de Avicennia germinans, Laguncularia racemosa y Rhizophora mangle, conocidos como mangle negro, blanco y rojo, respectivamente.
En el estado de Veracruz 33 municipios costeros tienen mangle; dentro de ellos destaca Alvarado, ya que el 14.8 por ciento de su territorio se encuentra cubierto por esta especie.
Los mangles tienen características muy específicas dentro del reino vegetal, como sus raíces aéreas, además de su capacidad de crecer en suelos que presentan deficiencia de oxígeno.
Los manglares son el hábitat de aves migratorias y residentes, y zona de protección de especies animales comerciales como peces, camarones, langostinos, cangrejos y moluscos; además capturan gases de efecto invernadero y son sumideros de dióxido de carbono –absorben el carbono de la atmósfera y contribuyen a reducir la cantidad de este contaminante en el aire.
Aunque los manglares son fuente de riqueza, en muchos casos son destruidos para dar paso a actividades como la acuacultura, el turismo y el cultivo de especies como la caña.
Esto ocurre debido a que gran parte de los bienes y servicios que ofrecen no se comercializan en los mercados y a que los beneficiarios no son quienes toman las decisiones de cambio de uso del suelo.
Silva López explicó que los pesticidas, herbicidas y otros químicos transportados por los ríos, matan la fauna de los manglares, sofocan las raíces y ahogan los mangles.
El ecosistema del manglar es muy sensible a las variaci0nes del nivel del mar, causadas por el cambio climático, ya que necesita un nivel estable para su supervivencia; igualmente, la destrucción de los arrecifes de coral afecta a los manglares, porque su fino sedimento se altera y las plántulas de los mangles no pueden enraizar.
Por último, subrayó la necesidad de difundir la importancia de los manglares, para generar acciones que ayuden a su preservación.