- Los alumnos de la Licenciatura en Publicidad y Relaciones Públicas presentaron el cartel “La realidad no se puede disfrazar”
Jorge Vázquez Pacheco
Xalapa, Ver.- Karem Melania Montero Cortés y Kevin Viveros Ávila, alumnos de la Licenciatura en Publicidad y Relaciones Públicas de la Facultad de Ciencias Administrativas y Sociales (FCAS) de la Universidad Veracruzana (UV), fueron distinguidos con el reconocimiento Caracol de Plata a los mejores mensajes de beneficio social realizados por jóvenes estudiantes de Iberoamérica.
La entrega fue de manera virtual el jueves 1 de octubre, en el marco del Foro Internacional de Pymes Socialmente Responsables; se detalló que la finalidad es estimular el talento en la creación de mensajes de beneficio social que ayuden a educar y crear conciencia en la población sobre la importancia de participar en su solución, así como apoyar a las organizaciones de la sociedad civil en sus tareas de comunicación. Este año la temática fue el Covid-19 y sus consecuencias; la promoción y coordinación fue del Centro Mexicano para la Filantropía.
Las cuatro categorías participantes fueron: Cartel/afiche, Medios alternativos, Medios digitales y Televisión. Los alumnos de séptimo semestre de FCAS se erigieron ganadores en el rubro Cartel/afiche por su ilustración con el tema “La realidad no se puede disfrazar”.
El programa Caracol de Plata elige anualmente un tema de interés y relevancia mundial, sobre el cual los estudiantes desarrollan sus trabajos.
Karem Melania y Kevin coincidieron en que el respaldo del académico José Luis Valades Varela resultó en el impulso básico para adoptar la decisión de participar en el concurso. El catedrático remarcó ante los alumnos la trascendencia y poder de los mensajes positivos.
“Durante el proceso pulimos la idea original y el maestro nos enriqueció con elementos complementarios, para dar forma a una imagen que ilustra el desamparo de la niñez marginada ante la tragedia de la pandemia. En nuestra imagen, un niño de condición humilde ostenta un cubrebocas pintado sobre su rostro, con la esperanza de que esta utopía le ayude a protegerse de la desgracia”, enunció Karem.
Por su parte, Kevin indicó que la distancia resultó un obstáculo pues ella vive en Cempoala y él en Plan del Río. “Tuvimos que ingeniárnoslas para mantenernos en contacto y no dejamos de trabajar hasta que estuvimos totalmente satisfechos con el logro; enviamos el cartel a concurso el 12 de mayo”.
Respecto a las mutaciones en las relaciones humanas y los elementos que permiten la comunicación, Kevin dijo que antes que extrañar la presencia del teléfono móvil y las redes de Internet, se añora el contacto humano, la charla con amigos y familiares, los paseos por el parque y caminatas entre la maleza.
“Esto lo contemplo como una dura lección acerca de lo que somos y la forma en que nos hundimos en un mundo fantasioso y vacío. Hoy, en la reclusión obligada, una de nuestras necesidades básicas es la compañía de nuestros seres queridos y familiares. Los modelos se han modificado y nosotros hemos cambiado con ellos.”
A Karem lastima sobremanera la desgracia de quienes arriesgan la salud en busca del sustento diario. “A mí me es sencillo quedarme en casa, pero qué hay de quienes tienen que salir a la calle en busca de comida y dinero. Esto me compromete a ser solidaria, a contribuir en la medida de lo posible para que esas personas puedan batallar dignamente contra los efectos de la pandemia”.
La iniciativa institucional
El académico Luis Valades manifestó su satisfacción por los resultados: “Estamos contentos del logro de los alumnos; fueron 70 participantes, de ellos se eligieron seis semifinalistas y a los ganadores. Ha sido un desafío de seis meses en que nos vimos obligados a implementar diversas acciones diferenciadoras. Agradecemos el apoyo de la Dirección General de Desarrollo Académico e Innovación Educativa, del Área Académica Económico-Administrativa, de la FCAS”.
Remarcó que este concurso ha funcionado para dos cosas importantes: para que nuestros estudiantes midan sus competencias ante colegas de otras latitudes latinoamericanas, y para tener clara conciencia de la importancia de los elementos publicitarios en el quehacer cotidiano.
¿Qué es Caracol de Plata?
Surgió en 1999 en el contexto de la actividad propia de la iniciativa privada. Desde sus inicios se esfuerza por sensibilizar a las empresas privadas y motivarlas al compromiso de colaboración en soluciones de problemática social. También apoya a las organizaciones de la sociedad civil mediante el empleo del mensaje de contenido social. A partir de 2004 amplió su campo de acción para dar cabida a los jóvenes universitarios.
En 2016, Caracol de Plata se incorporó como programa del Centro Mexicano para la Filantropía. Con esta unión de esfuerzos se enriquece la oferta de herramientas para un mejor ejercicio de la responsabilidad social empresarial, tanto en México como en diversos países de Iberoamérica. Sus motivos y propósitos se detallan en la página www.caracoldeplata.org