- Esta producción, basada en el libro Diario de una madre mutilada, de Esther Hernández Palacios, fue dirigida por la documentalista Alejandra Islas
Carlos Hugo Hermida Rosales
Xalapa, Ver. La Universidad Veracruzana (UV) y TV UNAM estrenaron la noche del 8 de marzo el documental Esther sin h, de Alejandra Islas, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
Este documental que participó en el 1er Taller de Análisis “Carlos Velo” para la postproducción de largometraje de no ficción, está basado en el libro Diario de una madre mutilada de Esther Hernández Palacios, académica e investigadora de la Facultad de Letras Españolas y del Instituto de Investigaciones Lingüístico-Literarias (IIL-L).
Esther sin h –coproducido por la UV, TV UNAM y Ave de Paso Films– refleja el proceso que Esther Hernández Palacios ha vivido a raíz del asesinato de su hija Irene Méndez, ocurrido en 2010.
La producción audiovisual muestra el testimonio de personas cercanas a la catedrática y a la joven fallecida: familiares, amigos, colegas e incluso encargados de librerías.
Desde diversas posturas, ya sea en sus hogares, lugares de trabajo o al participar en una manifestación, estas personas expresan su sentir por el fallecimiento de Irene y su esposo, y el vacío que dejó su partida.
Igualmente, refleja los movimientos de búsqueda de desaparecidos y cómo la docente se une a ellos para sobrellevar su proceso de duelo.
El documental también retrata la terrible violencia que azota al país y particularmente al estado de Veracruz, y los estragos que ha causado en los familiares y personas cercanas a las víctimas de ésta, quienes buscan justicia en unos casos y en otros mantienen la esperanza de encontrar a sus seres queridos con vida.
Esther Hernández comparte cómo formó su familia nuclear, pero también utiliza una franqueza dolorosa al manifestar que “no cree en la justicia del país, pero sí en el poder sanador de las lágrimas”.
Relata, además, cómo al día siguiente del asesinato de su hija, al tener que firmar un documento, de manera instintiva y natural eliminó la h de su nombre, suceso al que alude el título de este documental.