- El académico de la Universidad Autónoma de Barcelona impartió conferencia en el marco del Programa de Estudios sobre América del Norte de la Universidad Veracruzana
- Señaló que los hidrocarburos y el motor de combustión dejarán de ser preponderantes en la Cuarta Revolución Industrial
David Sandoval Rodríguez
Xalapa, Ver.- A primera vista la pandemia provocada por el coronavirus SARS-CoV-2 y la enfermedad Covid-19 no han afectado al comercio mundial; no obstante, la globalización está cambiando de eje, planteó Jordi Bacaria Colom, profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).
El catedrático en economía aplicada fue invitado por la Universidad Veracruzana (UV), a través de la Dirección General de Relaciones Internacionales (DGRI) y el Programa de Estudios sobre América del Norte (PEAN), para impartir la videoconferencia “Geopolítica y globalización ante la Cuarta Revolución”.
Bacaria Colom inició advirtiendo que la globalización ocurre desde la expedición de Marco Polo y ha dinamizado los intercambios entre continentes desde hace siglos. “La globalización es algo que no viene de ayer, hay épocas que cae como en la Gran Depresión y la crisis de hace una década, pero lleva más de un siglo ocurriendo”, dijo.
Señaló que la pandemia viene a confirmar las tendencias pronosticadas por los especialistas, “se ha producido una tormenta perfecta y estamos en un cambio de fase de la globalización, lo que podemos esperar después de la pandemia serán rebotes y la desaparición de sectores, como los coches tirados por caballos”.
Sostuvo además que “el comercio no ha disminuido con la pandemia, aparentemente no ha sido afectado y a pesar de Donald Trump, el comercio de Estados Unidos (EEUU) con China ha aumentado, así como el comercio chino con Sudamérica y Asia”.
Sin embargo, afirmó que las perspectivas de la globalización son preocupantes porque están prevaleciendo enfoques proteccionistas donde se privilegia al país, como en el caso de Trump, pero también el presidente electo Biden ha enfatizado la idea de “América (Estados Unidos) primero”, pero ésta no es una idea única del país norteamericano, está ocurriendo en otras naciones como en Reino Unido con el Brexit.
Destacó que el gran cambio que se está produciendo es el incremento de inversión y ganancias en el sector de servicios, “por eso esta globalización es digital y su centro de gravedad se ha desplazado, a lo que se suma que EEUU está perdiendo el paso en la tecnología, así como también la Unión Europea, ambos detrás de China”.
Puso como ejemplo que Europa depende de insumos elaborados por empresas del sector sanitario en China y en India a bajo costo, pero con la pandemia se han convertido en bienes estratégicos.
“Si hay una recuperación, por el momento no lo sabemos porque se espera una solución pronta mediante la vacuna; sin embargo, se debe considerar que hay sectores que se hunden y no vuelven a aparecer, por ejemplo, si cae el turismo y no hay demanda, se reduce la oferta y las empresas del sector cierran.”
A este escenario se suma el hecho de que “las democracias actuales enfrentan una crisis de confianza, a la que han contribuido tres décadas de globalización mal administrada que han producido grandes desigualdades”.
En tal aspecto, se ha encogido la clase media en EEUU, mientras que en China ha aumentado de manera exponencial, la desigualdad entre países ha disminuido pero la desigualdad dentro de los países occidentales ha crecido provocando movimientos de insurgencia social.
Precisó que “hay un desplazamiento de la economía basada en el consumo de hidrocarburos al consumo de minerales de tierras raras como el litio y el cobalto, considerados como minerales críticos para la Cuarta Revolución Industrial que es primordialmente de corte tecnológico, no obstante el motor de combustión interna va de salida y será sustituido por motores eléctricos”.
El catedrático puntualizó que “lo que está en juego son los nuevos desafíos para la competencia de China frente a EEUU, el proteccionismo no es la causa ni el efecto de la globalización, es una respuesta equivocada porque el sector servicios está aumentando y pase lo que pase, a causa de lo que sea, las decisiones en política económica van a tener que cambiar”.