Pez cebra: la nueva rata de laboratorio
Ivette Bravo Espinoza1, José Luis Olivares Romero2, Denisse Medina Morales3, Yoshajandith Aguirre Vidal2.
1Posdoctorado. Red de Estudios Moleculares Avanzados, INECOL A.C.
2Red de Estudios Moleculares Avanzados, INECOL A.C.
3Estudiante de Biología, Universidad Veracruzana.
Resumen: El uso del pez cebra como modelo de experimentación para el desarrollo de nuevos tratamientos para diferentes enfermedades, se ha popularizado tanto que podríamos considerarlos “la nueva rata de laboratorio”.
Palabras claves: Pez cebra, modelo experimental, farmacología.
Para obtener información de cómo es que se desarrolla una enfermedad, así como para la búsqueda de nuevas terapias, se requiere el apoyo de modelos experimentales. Particularmente, los modelos experimentales desarrollados en animales nos han ayudado a entender mejor el complicado funcionamiento del cuerpo humano y a desarrollar medicamentos para tratar diversas enfermedades. Los modelos más utilizados en el laboratorio, se enfocan al uso de ratas y ratones; probablemente creerás que son los únicos animales que nos pueden ayudar en esta tarea, pero déjame decirte que existe muchos otros animales e incluso insectos, que permiten desarrollar modelos de experimentación. Uno de estos increíbles animales es el pez cebra (Figura 1), sí, ese pequeño animal que podemos encontrar en los acuarios.
El uso del pez cebra en los laboratorios de experimentación se implementó alrededor de los años 70 y desde entonces su popularidad ha ido en aumento, ya que se ha convertido en una gran herramienta para el desarrollo de nuevos modelos de investigación que contribuye a grandes avances biomédicos.
El pez cebra tiene excelentes características para ser considerado “la nueva rata de laboratorio”. Entre sus atributos, destaca su rápida reproducción, ya que sabemos que una hembra adulta puede poner alrededor de 100 huevos por desove y en condiciones de laboratorio puede desovar en cualquier época del año. Además de su uso en la etapa adulta, este vertebrado puede ser utilizado como modelo para estudios relacionados al desarrollo embrionario, ya que el embrión del pez cebra es transparente y se desarrolla fuera de la hembra, facilitando la observación de su desarrollo (Figura 2). ¿Me creerías si te dijera que tan solo un día después de la fertilización el pez cebra ya tiene desarrollados la mayoría de los órganos y que a los 5 días ya es un animal completamente desarrollado? De hecho, es por esta razón que el pez cebra se ubican en el puesto número 1 de animales de experimentación para el estudio de desarrollo embrionario. Este modelo animal también es ampliamente utilizado para llevar a cabo estudios genéticos o de enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer o Parkinson. También es muy utilizado para el estudio de anomalías congénitas del corazón e inclusive cáncer; ya que las neoplasias de los peces son bastantes similares al cáncer humano (Figura 3) este modelo ofrece a los científicos una oportunidad de realizar estudios a bajo costo, que en otros modelos animales no podrían llevarse a cabo.
Por otro lado, se ha encontrado que el pez cebra tiene una asombrosa capacidad de regeneración. Entre los órganos y estructuras que este pez es capaz de regenerar se encuentran: hígado, corazón, retina, aletas y medula espinal.
Otra de las ventajas del pez cebra radica en el tamaño. Un pez cebra adulto mide entre 3 y 4 centímetros de largo, es mucho más pequeño que los roedores y por lo tanto ocupan menos espacio, lo que permite tener una mayor cantidad de animales, reduciendo el costo de mantenimiento hasta 100 veces en comparación con el alojamiento de ratas o ratones.
Finalmente es fundamental mencionar que siempre que se trabaja con animales de experimentación es importante hacerlo con ética y humanidad, procurando siempre el bienestar animal, siguiendo principios éticos como las tres Rs (Remplazo/Reducción/Refinamiento) y las normas vigentes en nuestro país para el cuidado y uso de animales de laboratorio (NOM-062-ZOO-1999).
Pie de figura
Portada: Imagen de Petr Kuznetsov en Pixabay
Figura 1: De Petr Kuznetsov en Pixabay
Figura 2: Principales etapas del desarrollo del pez cebra. Desde al embrión hasta su fase de larva
Figura 3: Pez cebra con tumoración. Imagen de Bruna Costa & Rita Fior. Champalimaud Centre for the Unknown.