LOS CABALLITOS POLITÓRIDOS
Rodolfo Novelo-Gutiérrez y Daniel Reynoso-Velasco
Red de Biodiversidad y Sistemática, Instituto de Ecología, A.C., (INECOL), Xalapa, Veracruz
(correos electrónicos: rodolfo.novelo@inecol.mx; daniel.reynoso@inecol.mx)
Resumen. Los Polythoridae son una familia de insectos “caballitos del diablo” pertenecientes al orden Odonata, cuyos adultos presentan una venación alar muy densa. Las larvas son acuáticas y presentan branquias abdominales laterales.
Palabras clave: Polythoridae, Región Neotropical, Cora marina.
Los insectos de la familia Polythoridae son endémicos de la región Neotropical, se distribuyen desde el estado de Jalisco en la vertiente occidental y el sur de Veracruz en la vertiente oriental de México hasta Bolivia y el norte de Brasil en Sudamérica. Actualmente se reconocen siete géneros con 60 especies. En México habita solo una especie: Cora marina (Fig. 1), mientras que la mayor diversidad se encuentra en Sudamérica. Los adultos son notables por su coloración oscura con bandas de color brillante principalmente en el tórax, las cuales pueden ser azules, amarillas, verdes o alguna combinación de ellas; las alas son anchas, con abundantes venas y generalmente con bandas transversales blancas, amarillas (Fig. 2), oscuras o combinadas y en ocasiones con destellos iridiscentes. Por su parte, las larvas se caracterizan por su coloración oscura, el cuerpo cubierto con abundantes sedas escamiformes, la presencia de branquias laterales digitiformes y enrolladas a cada lado de los segmentos 2 al 7 del abdomen, y tres branquias caudales infladas y con proyecciones (Fig. 3). Son las únicas larvas en todo el continente americano con branquias pareadas a lo largo del abdomen, lo cual las hace identificables fácilmente en el campo. Solo hay otro grupo de caballitos del diablo en todo el mundo que comparte esta última característica y es la familia Euphaeidae, que habita en los trópicos del sureste asiático.
Fig. 1. Macho adulto de Cora marina. Foto Rodolfo Novelo.
Fig. 2. Macho adulto de Euthore fassli. Foto Cornelio Bota.
Fig. 3. Larva de Miocora aurea. Foto Rodolfo Novelo.
En México, Cora marina habita en pequeños arroyos con abundante vegetación ribereña dentro de la selva. La especie es dimórfica ya que los machos exhiben una coloración azul brillante, mientras que las hembras son de color pardo. Los machos son territoriales y compiten entre ellos por las hembras y los sitios de oviposición. Cuando una hembra ingresa al territorio de un macho, éste le indica el sitio de oviposición al tiempo que levanta su abdomen mostrando la mancha azul; esta conducta se interpreta como un cortejo. Si la hembra acepta, la cópula se lleva a cabo posados en la vegetación ribereña. Las cópulas duran alrededor de cuatro minutos. Las hembras fertilizadas ponen sus huevos en troncos de árboles en proceso de descomposición que han caído sobre el arroyo o a un costado de éste, insertándolos en la madera húmeda con su ovipositor. Una vez completado el desarrollo embrionario, eclosiona la larva y cae al agua, donde pasará su etapa juvenil debajo de piedras y troncos en zonas con corriente moderada a rápida, alimentándose de otros organismos acuáticos hasta que llega el tiempo de la emergencia, momento en el cual la larva sale del agua trepando por las piedras o rocas que sobresalen del agua para llevar a cabo la última muda de su vida que dará paso al estado adulto. La emergencia ocurre en la época de secas cuando el nivel del agua es bajo y hay muchos sitios potenciales expuestos para emerger y el riesgo de ser arrastradas por la corriente es muy bajo. Después de emerger, los adultos pasan por una etapa de maduración sexual antes de concurrir a los sitios de reproducción. La estación de vuelo y reproductiva es marcadamente estacional abarcando los meses de julio a septiembre.
Agradecemos al Dr. José Antonio Gómez Anaya la edición final de las fotografías que acompañan este trabajo.