México. 27 de mayo del 2024.-El número de monos aulladores que han muerto debido al calor en México aumentó a 157, informó la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
En tanto, un parque ecológico en el norte del país confirmó que ha recibido informes sobre la muerte de por lo menos un centenar de pericos, murciélagos y otros animales, aparentemente por deshidratación.
Un domo de calor —una zona de alta presión— ubicado sobre el sur del golfo de México y el norte de Centroamérica ha evitado la formación de nubes y ha ocasionado mucho sol y altas temperaturas en todo México.
La semana pasada, ambientalistas reportaron que encontraron muertos a 138 de los primates en Tabasco.
Se había pronosticado que casi dos terceras partes del país experimenten temperaturas máximas de 45 grados Celsius (113 grados Fahrenheit) el lunes.
El domingo por la noche, la Secretaría de Medio Ambiente reportó que el número de monos muertos aumentó a 157 y que las causas de los decesos seguían bajo investigación.
¿Por qué están muriendo monos aulladores en México?
El biólogo de vida silvestre Gilberto Pozo atribuyó los decesos a un golpe de calor por una “sinergia” de factores, incluidas las altas temperaturas, la sequía, incendios forestales y la tala que priva a los monos de agua, sombra y las frutas de las que se alimentan. Añadió que no se puede descartar la presencia de patógenos, enfermedades y otros factores.
La secretaría señaló que las muertes ocurren tanto en Tabasco como en Chiapas. Además señaló que están atendiendo a 13 monos y siete estaban de regreso en su hábitat tras recibir atención. También indicó que están atendiendo a algunos de los ejemplares por deshidratación y que tres están en condición grave, pero estable.
Aun así, con el calor, los incendios y la deforestación afectando los árboles en donde viven los monos aulladores, no está claro si su liberación garantiza su supervivencia.
Los monos aulladores suelen ser bastante intimidantes: son musculosos y algunos pueden alcanzar los 90 centímetros (3 pies) de altura, con colas igual de largas. Algunos machos pesan más de 13,5 kilos (30 libras) y pueden vivir hasta 20 años.
Tienen grandes mandíbulas, y dentaduras y colmillos imponentes. Pero son conocidos mayormente por su rugido similar al del león, que contrasta con su tamaño.
En San Luis Potosí, la directora del parque ecológico Selva Teenek, Ena Buenfil, relató que su instalación se ha visto sumamente afectada por la muerte de pericos, murciélagos y tucanes a causa del calor.
Buenfil dijo que las aves mueren principalmente a causa de deshidratación por el calor, y a menudo se ven afectadas de forma desproporcionada debido a que no tienen dónde almacenar agua.
En tanto, los murciélagos pueden sufrir de deshidratación al dormir bajo el intenso calor de la tarde. Recomendó a la población colocar recipientes con agua para que los animales puedan hidratarse.