- “Al emprender no existe un camino claro para llegar al objetivo y éste debe acuñarse de acuerdo con las circunstancias”: Joaquín Paván
Joaquín Paván Gutiérrez
Carlos Hugo Hermida Rosales
Xalapa, Ver.– Joaquín Paván Gutiérrez, consultor de negocios, declaró que la motivación y la tenacidad, así como un correcto equilibrio emocional, son características primordiales con las que un emprendedor debe contar.
El Maestro en Administración de Empresas impartió el 26 de mayo la conferencia virtual “Personalidad del emprendedor”, dentro de la Semana de Emprendimiento e Innovación en Casa, realizada del 25 al 29 de este mes por la Oficina de Transferencia de Tecnología de la Dirección General de Vinculación de la Universidad Veracruzana (UV).
Joaquín Paván afirmó que el emprendedor es una pieza indispensable al momento de hablar de todo el proceso que implica lanzar un nuevo producto o negocio.
Mencionó que además de motivación, tenacidad y equilibrio emocional, quien decide emprender requiere de apertura a la experiencia, amabilidad e incluso cierta condescendencia.
Explicó que la tenacidad ayuda al emprendedor a impulsarse por sí mismo y a no necesitar que alguien le recuerde o anime a realizar las acciones necesarias para crecer; la motivación le auxiliará en la creación de hábitos positivos, y a deslindarse de los negativos.
El consultor enunció que es fundamental que el individuo que emprende establezca un calendario de metas, con el objetivo de cumplirlas en tiempo y forma; afirmó que si las plasma por escrito las probabilidades de realizarlas crecen 42 por ciento.
Añadió que si envía sus metas a un amigo, el porcentaje de probabilidad se eleva a un 50 por ciento, y si le comparte sus progresos paulatinos, crece hasta un 78 por ciento.
Joaquín Paván destacó la importancia que el equilibrio emocional juega en el emprendedor, ya que para sacar adelante un proyecto debe ser consciente de sus emociones y conocer lo mejor posible cómo reacciona ante ellas.
Afirmó que emprender es un proceso complejo que trae consigo emociones negativas, entre las que se encuentran ansiedad, miedo, frustración y enojo, y sentimientos positivos como la alegría que si se convierte en euforia, nubla la visión objetiva.
Mencionó que para quien emprende, determinar aquello que no debe hacer es tan importante como decidir lo que sí, y que por ello debe tener cuidado al momento de escuchar opiniones de gente que nunca ha emprendido.
“Al momento de emprender las personas te sugieren qué debes comprar, cuál será tu mejor proveedor, tu plan de acción, cómo desenvolverte e incluso con quién aliarte, por lo que se debe ser muy cauto al tomar consejos”, aseguró.
El consultor enfatizó que cuando se emprende no existe un camino claro para llegar al objetivo, y que éste debe acuñarse de acuerdo con las circunstancias, ante lo que la flexibilidad y capacidad de adaptación determinarán en gran parte el éxito o el fracaso del proyecto.