• Gustavo García, quien cursó la Licenciatura en Arqueología en la Facultad de Antropología, colabora en un proyecto del INAH que busca contar una versión diferente sobre la conquista, y recuperar la historia náutica perdida en el contexto 
Gustavo García García

Gustavo García García

 

Carlos Hugo Hermida Rosales 

Xalapa, Ver. Gustavo García Garcíade la Subdirección de Arqueología Subacuática del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), explicó que contrario a lo que la creencia popular dice, Hernán Cortés no quemó su flotasino la hundió en la playa Villa Rica, ubicada en el municipio de Actopan. 

Este acto fue realizado para que sus soldados no pudieran regresar a Cuba y tuvieran como única opción la conquista del Imperio azteca.  

El arqueólogo egresado de la Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV), participó el 5 de octubre en el anecdotario virtual “Tras los barcos hundidos de Hernán Cortés”, que fue organizado por el Centro Cultural Universitario de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas; el evento también contó con la presencia de Eduardo Cruz Soto, historiador y paleógrafo.  

Gustavo García compartió que desde 2018, a través del proyecto Arqueología subacuática en la Villa Rica, el INAH busca en las aguas de esta región los restos de los navíos que Cortés hundió en el siglo XVI.  

“Este proyecto busca contar una versión diferente sobre la conquista, y recuperar la historia náutica perdida en el contexto”, mencionó. 

Detalló que en este trabajo se emplea un sonar de barrido lateral y un magnetómetro, con el que miden el nivel magnético de la costa de la playa Villa Rica, en busca de anomalías interesantes. 

El arqueólogo puntualizó que para el INAH es indispensable llevar a cabo un ejercicio histórico en toda investigación arqueológica, ya que gracias a ello es posible recabar información más precisa. 

“Dentro del proyecto Arqueología subacuática en la Villa Rica’ no sólo nos quedamos con el dato arqueológico, sino que lo contrastamos con el histórico y gracias a ello hallamos información que indica que los navíos de Hernán Cortés no fueron quemados, sino perforados y hundidos”, declaró.  

Gustavo García relató que al dedicarse a la arqueología subacuática es indispensable dominar muchas metodologías, así como prepararse y certificarse para registrar los descubrimientos adecuadamente.  

“El trabajo arqueológico submarino representa una gran labor, ya que es necesario cargar material y realizar maniobras bajo el agua, lo que supone un alto gasto de oxígeno y limita el tiempo de buceo”, explicó.  

El arqueólogo comentó que hasta el momento dentro del proyecto mencionado ya han encontrado anclas del siglo XVI, y que analizan si pertenecen a los barcos que Hernán Cortés hundió.  

Enfatizó que no se tiene planeado sacar estas anclas del sitio en que se encuentran, ya que pertenecen a la historia de la playa de la Villa Rica y, como tal, deben permanecer allí.