LOS ÁRBOLES DE MÉXICO QUE SANGRAN
Alexis Arriaga Ramírez1
Leonel López Toledo1
Moisés Méndez Toribio2 y 3
1Instituto de Investigaciones sobre los Recursos Naturales, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Morelia Michoacán 58087, México
3Investigador por México del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT), Ciudad de México
Resumen: Apoplanesia paniculata es un árbol propio del bosque tropical caducifolio con características singulares al que habría que estudiar más. Una de éstas es que produce savia y resina roja parecida a sangre.
Palabras clave: Apoplanesia paniculata, llorasangre, antiplasmodial
Introducción
En el bosque seco o bosque tropical caducifolio, habita una especie de planta con características muy particulares. Se trata del “consangre”, “cansangre”, “llorasangre”, “palo de arco”, “chulul”, o “kiik-che”. Esta especie de árbol de la familia Fabaceae, llamada por los botánicos Apoplaneasia paniculata, tiene un tamaño promedio que alcanza hasta los 15 m de altura, suele tener un tallo delgado y no mayor a seis cm de diámetro a la altura del pecho. Sus hojas son imparipinadas, es decir, se distribuyen en pares alrededor de un raquis o eje central en grupos de cinco a ocho pares de foliolos: hojitas más pequeñas (ver figura 1). Las flores del cansangre son blancas, pequeñas y muy numerosas, usualmente estas se encuentran amontonadas en forma de pirámide asemejando a un racimo de flores.
Este árbol se puede encontrar en la mayoría de los bosques secos de México, país en el que se ha documentado la mayor ocurrencia de registros especialmente sobre la vertiente sureste del Pacífico, en la Península de Yucatán y la Cuenca Baja del Río Balsas. Sin embargo, también se ha registrado en Guatemala, Honduras, Nicaragua y Costa Rica. Por lo que no se descarta su presencia en otras latitudes del continente americano, sobre todo en lugares con vegetación de bosque seco.
Propiedades curativas del llorasangre
En México, particularmente en el estado de Michoacán, se ha documentado el uso medicinal de esta planta para tratar “problemas del corazón”. La manera en que se procesa este “remedio”, es mediante la cocción de hojas del árbol y su posterior empleo como agua de “uso diario”, la cual cobra un color rojizo debido a que expulsa sustancias de las glándulas presentes en las hojas de estos árboles. En el estado de Guerrero, también se ha documentado el uso medicinal de esta planta para “curar el ombligo”. El remedio consiste en colocar en medio del vientre hojas machacadas y mezcladas con aceites de olivo, rosado y de almendras.
Además, en el año 2015 un grupo de investigadores de la Universidad Virginia Tech en Estados Unidos, evaluaron el efecto que tienen los extractos de la raíz de Apoplanesia paniculata para combatir al Plasmodium falciparum, parásito que causa la malaria en humanos. Los resultados del estudio fueron bastante positivos. Esto es muy prometedor en la búsqueda de opciones de medicinas que nos puedan ayudar a combatir la resistencia a los antibióticos que pudiera asociarse con la mayor presencia de malaria en un futuro cercano.
Los árboles que “sangran”
En el planeta Tierra existen muchos árboles que secretan resina roja o que tienen savia rojiza haciendo parecer que literalmente sangran cuando se les provocan lesiones. Probablemente el caso más estudiado es el de la especie Croton draco popularmente conocida como “sangre de drago”, la cual es una especie americana que produce resina roja. Sin embargo, también se conoce la existencia de otras especies como Pterocarpus angolensis, comúnmente conocida como “kiaat”, “mukwa” o” muninga”, la cual es una especie con savia roja de origen africano, o la especie Corymbia terminalis, árbol de origen australiano que también cuenta con savia rojiza.
El caso del cansangre aún no es claro, se sabe que estos árboles cuentan con glándulas parecidas a verrugas en el tallo y hojas que secretan un tipo de resina muy espesa de color rojo intenso (ver figura 2), sobre todo en épocas calurosas del año. Asimismo, al cortar el tallo de estas plantas, se vierte savia rojiza, la cual era utilizada en la época precolombina por los mayas para teñir telas. Sin embargo, las causas de la coloración rojiza en la savia y resinas de esta especie aún son poco claras, por lo que sería interesante tener información sobre la histoquímica, la organización estructural de las glándulas, su ontogénesis y los posibles usos que se puedan hacer de esta especie.
Referencias
Su, Q., Krai, P., Goetz, M., Cassera, M. B., & Kingston, D. G. I. (2015). Antiplasmodial Isoflavanes and Pterocarpans from Apoplanesia paniculata. Planta Medica, 81(12–13), 1128–1132. https://doi.org/10.1055/s-0035-1546036.
Soto-Nuñez, J. C. (1987). Las plantas medicinales y uso tradicional en la cuenca del Río Balsas; estados de Michoacán y Guerrero. Tesis de licenciatura, Universidad Nacional Autónoma de México. https://ru.dgb.unam.mx/handle/DGB_UNAM/TES01000045116
López Sandoval, J. antonio. (2016). Herbolaria Apuntes. Manual de apuntes, Universidad Autónoma del Estado de México. http://ri.uaemex.mx/bitstream/handle/20.500.11799/63020/secme-5145.pdf?sequence=1