NUEVAS ESPECIES VEGETALES, RIESGOS Y ALTERNATIVAS
Daniela Espinosa Morales y Martín Mata Rosas
Red de Manejo Biotecnológico de Recursos, Instituto de Ecología A.C.
Para los biólogos, particularmente para los botánicos y taxónomos, es un gran logro el descubrir y describir nuevas especies de plantas, es un trabajo que implica gran conocimiento y muchas horas de estudio, tanto en campo como en herbarios. Como se sabe, México es un país poseedor de una gran diversidad biológica, con respecto a plantas vasculares, se pueden encontrar alrededor de 25,000 especies. Las cactáceas son un grupo representativo de México, familia botánica que cuenta con 1,400 especies en todo el mundo y México alberga casi la mitad de ellas, aproximadamente 670 y el 77% de éstas son endémicas.
Los cactus son altamente apreciados como plantas ornamentales, existe una fascinación por su cultivo, lo que ha ocasionado un gran comercio de sus especies en el mundo, por lo que el descubrimiento y descripción de nuevas especies atrae mucho la atención, particularmente de los coleccionistas, para poder completar sus colecciones. Existen casos muy penosos donde han dado a conocer las localidades donde se distribuyen algunas especies de cactus, por ejemplo, Ariocarpus bravuanos, Astrophytum caput-medusa, algunas especies de los géneros Aztekium, Turbinicarpus, Astrophytum entre otras, provocando que sean colectados ilegalmente para satisfacer la demanda comercial y ocasionado casi su extinción. Frecuentemente son extranjeros los que buscan estas especies, visitan nuestro país, recorren las poblaciones de especies de interés y colectan material de manera ilegal, porque es común que, al poco tiempo, estas especies se encuentren disponibles para su comercio.
Un ejemplo es un cactus relativamente nuevo, Mammillaria bertholdii, descubierto en Oaxaca en 2013 y descrita en el 2014. Esta nueva especie tiene varios caracteres morfológicos que permiten ubicarla como una novedad dentro del género Mammillaria. Se caracteriza principalmente por el gran tamaño de sus flores y la forma aplanada de sus tubérculos que crecen a ras de suelo. Como novedad botánica, sus poblaciones conocidas han sido visitadas por individuos de diferentes nacionalidades para colectar ejemplares y corren el riesgo de que sus poblaciones disminuyan hasta ponerla en alto riesgo de extinción. Afortunadamente las autoridades locales han sido alertadas y actualmente solo con su permiso y supervisión es posible visitar estas poblaciones. Una alternativa para su conservación y aprovechamiento sustentable es la producción de plantas mediante la germinación de semillas, pero al ser una especie protegida por el gobierno mexicano, es necesario establecer una Unidad de manejo y aprovechamiento sustentable de la vida silvestre (UMA), trámite que se realiza ante la SEMARNAT.
Existe otra técnica que puede en conjunto con la germinación de semillas, ayudar en la producción masiva de plantas en grandes cantidades, el cultivo in vitro, que es un conjunto de técnicas que permite la propagación vegetativa de plantas mediante la siembra de cualquiera de sus partes (tallo, raíces, hojas, meristemos, etc.), en un medio nutritivo químicamente definido y condiciones controladas, libres de contaminantes y bajo condiciones de laboratorio. Cada especie responde de manera diferente a las condiciones de cultivo in vitro y cada protocolo de propagación in vitro debe definirse experimentalmente. En el Instituto de Ecología, A. C. (INECOL) hemos logrado establecer un protocolo de micropropagación de Mammillaria bertholdii, con el cual se pueden producir hasta 20 plantas a partir de una sola, reduciendo tiempos de crecimiento, ya que en un año se logra obtener una gran cantidad de plantas adultas que pueden florecer. Este protocolo de propagación in vitro puede emplearse para la producción masiva de esta y otras especies de cactus, lo que permitiría satisfacer la demanda comercial existente y desalentar el saqueo de plantas en su hábitat, contribuyendo a su conservación y uso sustentable.