EL ARTE DEL MONTAJE

Jorge Gabriel Sánchez-Ken

Red de Diversidad Biológica del Occidente Mexicano

Centro Regional del Bajío en Pátzcuaro, Instituto de Ecología A.C.

 

Fotografía 1. Planta prensada con su etiqueta de colecta (J.G. Sánchez-Ken).

Resumen: El arte del montaje es la forma más óptima como se preservan animales y plantas muertas en los museos y herbarios.

 

Palabras clave: Ejemplar botánico, herbario, museo

 

En la vida cotidiana creo que todos hemos escuchado la frase de “el arte de montaje”, y eso nos lleva a pensar que se trata de un filme o una película. En los últimos años, esta frase ha cobrado mucha relevancia, asociada a la política y a los medios de comunicación, y en muchos casos se han convertido en eventos virales y escandalosos.

¡Sin embargo, el arte del montaje al que me refiero no tiene nada que ver con política, periodismo, obras de arte, teatro o danza! Tiene que ver con la ciencia, en particular con la biología, en sus disciplinas que estudian las plantas y los animales. Ustedes se preguntarán ¿qué tiene que ver el arte del montaje con la biología, en cualesquiera de sus líneas de investigación? El arte del montaje es vital en muchas áreas de la biología, las que utilizan fotografía y cine para la explicación o narración de eventos en la naturaleza como lo hemos visto en documentales o alguna exposición fotográfica y artística, o bien los museos y herbarios que albergan animales y plantas muertas.

Fotografía 2. Ejemplar de herbario montado (J.G. Sánchez-Ken).

Con el avance de la tecnología, se han generado múltiples evidencias o formas de documentar a la naturaleza (ej. sonidos, granos de polen, ADN, excremento, pelos, etc.), y cada una de estas precisan tener un método o técnica de montaje para preservarlos y sirvan como objetos de estudio en análisis presentes y futuros. No obstante, en el campo de la zoología y botánica, disciplinas muy viejas, cuentan con técnicas de montaje muy simples desde su origen, y que son vitales en la conservación de plantas y animales, actuales y extintos. Cada una de las subdisciplinas de estos campos que estudian algas, plantas vasculares, hongos, bacterias, organismos unicelulares, animales, fósiles, huesos, pieles, plumas, etc. guardan sus objetos de estudio en colecciones especializadas llamadas herbarios y museos zoológicos o de historia natural.

Cada colección de organismos utiliza diferentes técnicas de montaje apropiadas al tipo de organismo que se está montando y al tipo de museo donde es albergado. Por ejemplo, el montaje de una planta prensada, una mariposa muerta y seca, el cadáver de un ave, restos fósiles de un dinosaurio, etc. utiliza técnicas especiales propias de cada grupo de organismos, ya que no es lo mismo montar un hueso que montar una planta para un ejemplar de herbario.

En la botánica, la técnica de montaje de ejemplares de herbario más antigua y simple se reducía a producir un catálogo, un libro en el cual se ponía una planta prensada entre dos páginas, muy romántico. Esta técnica original se ha perfeccionado con la aparición de materiales más resistentes al paso del tiempo, estructura química adecuada de los materiales, mejor distribución de las muestras, formas de adherir o fijar las muestras en las cartulinas, esto permite un mejor acceso a la observación de sus estructuras, mayor duración y preservación de la muestra montada. La estructura y componentes químicos de los materiales adecuados evitan la liberación de químicos que puedan dañar a la muestra y un montaje óptimo, quizá un poco artístico, producen un ejemplar montado sea agradable a la vista.

Fotografía 3. Aplicando tiras de papel engomado en algunas partes de la planta prensada del ejemplar de herbario (J.G. Sánchez-Ken).

Muchos de los ejemplares botánicos colectados alrededor de 1753, cuando Linneo publicó su sistema de clasificación, aún se conservan en los herbarios europeos, sin embargo, muchos de ellos son catálogos antiquísimos, y por ello son mucho muy delicados en su manejo y no cualquiera puede tener acceso a ellos. Con el paso del tiempo, la aparición de más instituciones y universidades que estudian plantas originó que se crearan nuevas colecciones y que las existentes crecieran, dando paso a una evolución o desarrollo de las técnicas de montaje. La técnica de montaje de ejemplares de herbario no es única, en la mayoría de los herbarios del mundo utilizan diferentes técnicas de montaje, quizá con la esperanza de que haya una unificación universal de la técnica. Algunas técnicas no son las mejores y ni las más óptimas, y de hecho son las peores técnicas de montaje que puedan existir ya que es imposible estudiar y extraer la información de las estructuras morfológicas de los ejemplares de herbario. Por ejemplo, en algunos herbarios los ejemplares prensados son totalmente bañados en pegamento y pegados en las cartulinas, el resultado es que es imposible estudiar esos ejemplares sin destruirlos. Si se necesitara recolectar una muestra para análisis de ADN, sería más que imposible. En otros herbarios, las plantas prensadas sólo están fijadas con papel engomado, que con el paso del tiempo fácilmente se desprende de la cartulina y los ejemplares quedan sueltos y expuestos a daños al consultarlos. En algunos otros herbarios, utilizaban solo alfileres o clips, que con el tiempo se oxidaban y el montaje terminaba siendo malo. Se pueden listar otras formas erróneas de montaje, pero es posible que en el futuro haya una corrección de esas formas de montar.

Todos estos errores de montaje originaron que se estandarizaran las técnicas de montaje, la distribución de las plantas prensadas, los materiales de montaje, y el contenido esencial de los ejemplares de herbario. Actualmente, de los materiales que se usan en el montaje, como el tipo de papel debe ser blanco, sin ácidos ni contenidos de lignina, y con pH básico.  El papel engomado, el pegamento y el hilo también deben estar libres de ácidos para que no dañen a la planta montada.

El arte del montaje se ve reflejado en un ejemplar de herbario, donde la planta está centrada, generalmente mostrando el haz y envés de una o varias hojas, sólidamente fijada sin temor a que se desprenda (puntos de sutura y papel engomado suficientes); la fijación de las hojas, flores y/o frutos debe permitir su estudio sin destruirlos. El ejemplar de herbario siempre debe haber una etiqueta con los datos de colecta y el nombre de la especie, además del sello del herbario al cual pertenece y el número de ejemplar del herbario. También es importante que, en una de las esquinas de la izquierda de la cartulina, haya un sobre, en el cual se guarda pedacería, hojas, flores y/o frutos del ejemplar que sirven para manipular y estudiar al ejemplar sin destruir a la muestra montada. Finalmente, en muchos herbarios, para una mejor preservación del ejemplar, éste es cubierto con una camisa, la cual es un pliego de papel libre de ácidos que es doblado envolviendo al ejemplar montado y en el exterior lleva inscrito el nombre de la especie, de la familia y en muchos casos el estado geográfico de procedencia fue colectada.

 

Bibliografía

Biggs, L., S. Coffey, S. James, K. Knight, C. Parker, J. Percy-Bower & E. Wood-Ward. 2021. Vascular Specimen Mounting Guidelines. Department of Biodiversity, conservation and Attractions, Western Australian Herbarium. Australia.

Jacksch, J. Mounting Herbarium Specimens. Herbarium of the University and ETH Zürich. Switzerland.

Johnston, L.D. 1990. Collecting, Preserving and Mounting Plant Materials. Oregon State University Extension Service. Oregon, U.S.

 

Pie de figura:

Slider. Cortando los hilos de la sutura en la parte posterior del ejemplar de herbario (J.G. Sánchez-Ken).