Descubrimiento de una nueva especie de planta carnívora endémica de México

1*Martín Mata Rosas, 2Julián Hernández Rendón, 3Sergio Zamudio Ruiz, 4María Magdalena Salinas

1Instituto de Ecología, A.C., Red Manejo Biotecnológico de Recursos; 2Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, Universidad de Guadalajara; 3 Apartado Postal 392, Pátzcuaro, Michoacán; 4Herbario de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Autónoma de Nuevo León

*martin.mata@inecol.mx

 

Resumen

Se narra el particular proceso que llevó el redescubrimiento y descripción de la especie carnívora Pinguicula warijia endémica de la Sierra Obscura, municipio de Uruachi, Chihuahua.

 

Palabras claves: Pinguicula warijia, planta carnívora, Sierra Obscura

 

En México es posible encontrar diversas especies de plantas consideradas como carnívoras, también llamadas plantas insectívoras, destacando por su riqueza el género Pinguicula, del cual se distribuyen en nuestro país 52 especies, lo que representa prácticamente la mitad de las especies que existen en el mundo y es de resaltar que la mayoría son endémicas, es decir, son única y orgullosamente mexicanas.

Debido a la accidentada topografía, diversidad de climas y ecosistemas que se encuentran en México, muchas especies han encontrado las condiciones propicias para su evolución y diversificación, tal es el caso de las Pingüiculas, por lo que es tarea de los biólogos, principalmente de aquellos especialistas en botánica el estudiar, investigar y describir las diferentes especies de plantas, actividad que involucra múltiples habilidades y gran conocimiento. En la segunda mitad del siglo pasado, el registro de la flora de México ha avanzado significativamente, pero todavía estamos lejos de tener un inventario completo de las especies que existen en nuestro país. Como ejemplo, podemos mencionar que en los últimos cinco años se han descrito ocho nuevas especies de Pinguicula, la más reciente y motivo del presente artículo Pinguicula warijia Zamudio, Hern.Rend., Mata-Rosas & M.M. Salinas-Rodríguez, descrita en enero de 2023.

La historia de esta especie es particular, ya que se conocía de su existencia desde 1972, cuando el horticultor alemán Alfred Lau la localizó y fotografío en la región montañosa de Sierra Obscura, Chihuahua, México, y a pesar de que desde entonces se tuvo la sospecha de que se trataba de una posible nueva especie, ésta no fue formalmente descrita y solo se hizo referencia a ella como Pinguicula sp. “Sierra Obscura”. Cinco años después Lau regresó a la zona y colectó algunas semillas que envió a Stan Lampard quien vive en Inglaterra; Lampard logró que las semillas germinaran y las plantas crecieran, lamentablemente al siguiente año éstas murieron por un ataque de hongos, así que esta planta continuó sin poder ser descrita ni nombrada. En las notas que escribió Alfred Lau, mencionó que esta especie de Pinguicula crece en la misma zona donde se localizó y describió a Graptopetalum bellum, una planta suculenta perteneciente a la familia de las Crasuláceas; también dijo que alcanzar la población de estas plantas era extremadamente difícil y que solo era accesible durante la temporada de secas.

Debido a la poca información que se tenía de esta zona, a la topografía accidentada y a los fuertes contrastes altitudinales de la sierra nadie había podido localizar de nuevo la población de la Pinguicula sp. “Sierra Obscura”, permaneciendo oculta a los ojos de los científicos por más de 50 años y mencionada solamente como una anécdota, incluso convirtiéndose en todo un enigma.

No fue sino hasta  mediados del año 2020 y principios del 2021 que los biólogos María Magdalena Salinas, Julián Hernández Rendón y Ricardo Quirino Olvera, realizaron exploraciones botánicas en busca de Agaves en las cercanías de la región de Sierra Obscura; desde la expedición del 2020 ellos sospechaban que podían estar cerca de la localidad de esta mítica Pinguicula, por lo que  en la expedición del 2021, decidieron visitar las comunidades de El Rebaje y El Serruchito, en el municipio de Uruachi, acompañados por un gran conocedor del estado de Chihuahua, el profesor Raúl Fierro Ruiz; después de preguntar sobre las plantas y enseñar fotografías a los habitantes de esas localidades, tuvieron la fortuna de conocer a un guía local, el Sr. Arnulfo Méndez, perteneciente al pueblo originario Warijó, quien les aseguró conocer las plantas y los condujo al sitio donde él recordaba vagamente haberlas visto, los guio en las profundas e intrincadas barrancas del arroyo Babarocos; sin embargo, no lograron encontrarlas, por lo que le solicitaron de favor que si las llegaba a encontrar, les avisara. Para su grata sorpresa, a los pocos días el Sr. Arnulfo pudo localizar una población y envió algunas fotografías como prueba, donde no dejaba duda que por fin se tenía la localización precisa de una población de la enigmática Pinguicula sp. “Sierra Obscura”.

Con la certeza de poder visitar y colectar ejemplares de la planta para determinar si realmente se trataba de una nueva especie, los autores del presente artículo planeamos con el apoyo de amigos y autoridades del municipio de Uruachi, una tercera expedición a inicios de junio de 2022.

Con la guía del Sr. Arnulfo nos adentramos al cañón de Babarocos y después de caminar por varias horas por las pronunciadas pendientes del cañón y ante paisajes espectaculares, el guía nos señaló una pequeña zona donde resaltaba una zona verde con diversos árboles y arbustos, que contrastaba con el resto del paisaje, ya que estábamos en la época de sequía, al llegar a esa zona nos percatamos que era un recoveco en la ladera de la montaña, la pared era un escurridero de agua natural, quedamos fascinados al contemplar la pared cubierta por Pingüiculas en plena floración, las hojas de las plantas mostraban colores desde el verde al púrpura, con flores  de color rosa, creciendo orientadas hacia el sur, orientación particular ya que la mayoría de las especies de Pinguicula se desarrollan en paredes con orientación norte. Unos metros más adelante y para continuar con nuestra fascinación, encontramos una pequeña cornisa o cueva donde pudimos observar un espectacular techo cubierto de plantas que crecían boca abajo. Después de colectar ejemplares para herbario y algunas plantas y semillas para cultivo, comenzamos el largo y pesado ascenso, pero eso sí, con este hallazgo se nos olvidó el cansancio.

Al estudiar los ejemplares colectados y compararlos con especies semejantes, pudimos concluir que efectivamente se trataba de una especie nueva para la ciencia a la cual decidimos nombrar Pinguicula warijia en honor al pueblo originario que habita en esta zona y a nuestro invaluable guía Arnulfo, perteneciente a ese grupo étnico.

Los invitamos a leer nuestra publicación científica de la descripción de esta bella especie https://www.biotaxa.org/Phytotaxa/article/view/phytotaxa.578.3.1

Pie de figura:

Fotos: Pinguicula warijia – Crédito: Martín Mata Rosas, Julián Hernández Rendón, Sergio Zamudio Ruiz, María Magdalena Salinas